Entre ojos cansados y adormilado respirar,
escuchando una suave canción de fondo aquí me siento a pensar,
y entonces siento la calma, el reposo que Dios me da,
una leve sonrisa se dibuja y un pálpito se hace notar.
Y entonces siento, corazón, que todo está bien,
no hay nada extraño ni con doblez,
todo fluye como un río claro,
comienzo a ver manifiesto todo por lo cual había orado.
Te descubro y me gusta,
y entonces siento que nada me asusta,
todo es tan natural, es que Él me prometió que a su tiempo todo sería tan hermoso,
y entonces siento que esperar no es gravoso,
aprender a amarte es como un renuevo, un alivio,
en mi espíritu sé que también te hago sentir vivo.
Con amor,
Virginia L.